El diseño de la última representante de la mítica serie M no aporta ningún cambio significante frente a modelos precedentes: interior de aleación de magnesio, cuerpo metálico y textura de piel.
Monta un CCD de 10,3 millones de píxeles (con unas dimensiones de 18 x 27 milímetros) firmado por Kodak, con un factor de multiplicación de 1,33x. La pantalla TFT es de 2,5 pulgadas y 230.000 píxeles de resolución. Ofrece sensibilidades entre 160 y 2500 ISO. El disparo en ráfaga alcanza los 2 fotogramas por segundo (con un límite de 10 imágenes). Para almacenamiento, cuenta con una ranura para tarjetas SD Card, donde se pueden almacenar imágenes en formato JPG o en el estándar RAW de Adobe (DNG).
Se pondrá a la venta a lo largo del mes de octubre y el cuerpo tendrá un precio de 4.200 €.
Habrá que esperar a las primeras pruebas para ver los resultados de esta cámara sobre el terreno. Leica se ha tomado su tiempo para dar el salto al digital en su serie más prestigiosa. ¿Comenzará aquí un nuevo capítulo de la leyenda? ¿Aprobará el salto al digital la cámara más famosa de la historia? ¿Conseguirá reinventarse a sí misma o llegará tarde y mal al tren digital? Lo iremos viendo. El universo Leica siempre se ha regido por unas leyes particulares.
Más información en la página oficial de Leica y en Quesabesde. Por su parte, Phil Askey y Simon Joinson han publicado una extensa prueba en Dpreview.
Su distribuidor en España: Disefoto.
Junto a la M8, Leica ha presentado dos nuevos objetivos: el zoom Tri Elmar-M 16-18-21 mm F4 ASPH (3.500 €) y el Elmarit-M 28 mm F2.8 ASPH (1.300 €).
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